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Latino Beginnings


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7 responses to “Latino Beginnings”

  1. Es un texto precioso. Yo me sentía diferente en Vanderbilt (del 1992 al 1997) y luego como profesora en Providence College (1998-2003); jamás me pude identificar como “latina” o “hispana”, pero tampoco como inmigrante. Sencillamente era una puertorriqueña de paso por Estados Unidos. Una vez regresé, corté el hilo. Engaveté los recuerdos. No sé si algún día me interese desempolvarlos. Fueron 10 años que me formaron pero los veo como un paréntesis lejano, aunque vivo agradecida de la experiencia. Es posible que tenga que ver con el hecho de que mi mamá estuvo un año conmigo allá y murió varios meses después de mi graduación. Es fascinante ver cómo las madres logran marcar profundamente esos tránsitos “migratorios”. Hoy miro las multitudes cruzando la frontera, como las muestran en los noticieros, y lo que me invade es una sensación de miedo. Me da mucho miedo pensar en los peligros que corren, sobre todo, los niños. ¡Ni pensar en la angustia de las madres! Voy a buscar el libro de Tobar. ¡Gracias!

    • Gracias por leerme y por escribirme, Carmen. Cada vez que he cambiado de lugar, de PR>MX>PR>MA>TX>CT>MA>TX>NY>TN he sentido que mi persona muestra aspectos antiguos, heredados tal vez, y partes ágiles que se ajustan con gusto al nuevo lugar. Cuando vivimos en México me encantaba hablar en el “chilango” del DF, pero peleaba en el recreo por defender mi puertorriqueñidad tan acentuada por los EEUU.

  2. Me encantó el texto, Benigno, y también la anécdota. Como dices (que dice Tobar), las anécdotas migratorias que (nos) contamos necesariamente las enfocamos en los efectos del desplazamiento, en las negociaciones con nuestros nuevos lugares, en la intensidad de la posibilidad de la nueva vida y la fuerza del presente casi que borra el contexto que lo enmarca.

    La historia de la foto, que es tu historia, es interesante por muchas razones, como dices. A mí, particularmente, me da curiosidad esa transición tuya, de Puerto Rico a México a Puerto Rico a ¿la universidad?. Ahí hay un montón. En un comentario anterior a este mencionas tu experiencia chilanga. Ojalá alguna lectura te lleve a reflexionar sobre ella.

    La foto también me hizo pensar, como dices, en cómo habrá visto ese mismo instante tu mamá (a quien tengo presente a menudo porque la enseño casi todos los semestres en alguno de mis cursos), o el mismo Jorge (que recién murió hace algunas semanas y que escribió dos libros que me motivaron mucho durante la escuela graduada).

    En fin, gracias por la reflexión, tan breve y sugerente como las otras.